El exalcalde de Cali, Maurice Armitage, habría sellado un acuerdo político con el presidente Gustavo Petro para respaldar al aspirante presidencial que el mandatario elija para las elecciones de 2026. La decisión, que marca un giro inesperado en la posición del empresario y exmandatario local, ya genera intensas reacciones en los sectores políticos del Valle y del país.

Según fuentes cercanas al exalcalde, el entendimiento entre ambos líderes se consolidó tras un gesto del Gobierno Nacional que resultó clave para los intereses empresariales de Armitage. En 2024, Petro accedió a la solicitud de no permitir la importación de acero desde Perú, Turquía y China, una medida que salvó de una profunda crisis a la siderúrgica de Armitage, una de las más importantes del suroccidente colombiano. En reciprocidad, el empresario caleño habría manifestado su disposición a apoyar la candidatura que el presidente respalde, incluso si se tratara de un nombre polémico como el de Daniel Quintero, exalcalde de Medellín y uno de los más cercanos al petrismo.

El anuncio no ha pasado desapercibido. Mientras sectores de izquierda celebran el respaldo de un empresario influyente del Valle, en otros frentes políticos y gremiales se cuestiona el aparente intercambio de favores entre el Gobierno y el exalcalde. Analistas locales advierten que el vínculo entre una decisión económica y un compromiso político podría abrir un debate ético sobre los límites entre la gestión pública y los intereses privados.

Armitage, quien gobernó Cali entre 2016 y 2019, había mantenido una postura de independencia frente a los partidos tradicionales y a los extremos ideológicos. Su acercamiento con Petro contrasta con su discurso de moderación y gestión empresarial, lo que genera incertidumbre sobre sus intenciones políticas de cara al futuro.

Aunque el exalcalde no ha confirmado oficialmente si buscará volver a la Alcaldía de Cali en 2027, el eventual apoyo del petrismo podría alterar el panorama electoral en la ciudad. Algunos líderes locales consideran que esta alianza “pone en entredicho la coherencia” de un dirigente que en el pasado se distanció de las posturas del Gobierno Nacional.

El acuerdo, además, reabre el debate sobre la relación entre el poder económico y el político en Cali, una ciudad donde los movimientos independientes han ganado espacio en los últimos años. Mientras tanto, los caleños ya se preguntan: ¿votarían nuevamente por Maurice Armitage sabiendo que su respaldo político estaría alineado con el presidente Petro?